Telcel no quedaría excluido de la licitación de los 2.5 GHz

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Por Nicolás A. Lucas

El Economista

El plazo para que la banda de los 2.5 Gigahercios se ponga a disposición del mercado, ahora para telefonía e Internet móvil, se acerca. Este mismo martes el Instituto Federal de Telecomunicaciones, a través de su Unidad de Espectro Radioeléctrico (UER), someterá a una consulta pública de 20 días hábiles de duración su propuesta sobre cómo deben adjudicase los 130 MHz que en setiembre del 2013 se recuperaron de las manos de una decena de empresas que antaño los explotaban para servicios de televisión por microondas.

Es la Licitación IFT-7, que desde mañana y hasta el lunes 4 de septiembre lleva a su proyecto de bases a la atapa de opinión pública.

La UER propone licitar seis bloques nacionales de espectro: dos bloques de 20 MHz cada uno sobre tecnología de transmisión que la industria identifica como de TDD y el resto, cuatro bloques pareados de 10 MHz aptos para tecnología FDD, más dos bloques de 5 MHz que se utilizarán como bandas de guarda para evitar interferencias entre concesionarios.

De esta manera, el regulador estaría colocando los 130 MHz rescatados en la banda del 2.5 por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes en septiembre del 2013: 120 para su explotación comercial y 10 para salvaguardas.

Por cada bloque, el regulador ha propuesto un precio mínimo de salida de 350 millones de pesos y una garantía de seriedad de 700 millones de pesos por participante, independientemente del número de bloques por los que éste muestre interés.

Por tanto, en el mejor de los escenarios, el IFT estaría levantando a favor de la Nación cuando menos 117 millones de dólares, en el supuesto de que logre adjudicar todos los anchos de banda disponibles con el precio base y sólo por los pagos de las contraprestaciones. Colombia licitó una cantidad similar de espectro de esa banda en el año 2013 y recaudó entonces cerca de 400 millones de dólares.

El método de subasta propuesto es el combinatoria de reloj, muy similar al utilizado en la licitación de AWS o de 1.7/2.1 GHz del año 2015.

Al respecto del bloque de 10 MHz que nadie quiso del espectro AWS en ese año, queda descartada la posibilidad de que sea integrado a esta licitación para una nueva subasta, definió el regulador.

La intención de IFT es que toda la industria tenga oportunidad de competir por un trozo del 2.5 GHz que un día pertenecieron a MVS Comunicaciones, Megacable y otras empresas más que convinieron devolver o todo el espectro o 130 de los 190 MHz de que componen esa banda.

La Unidad de Espectro Radioeléctrico propuso entonces el establecimiento de límites a la tenencia del espectro, con los que algunos operadores podrán ir por todos los bloques desde el inicio de la subasta y otros, hasta la segunda fase de la misma; si es que los primeros no muestran el suficiente interés por las frecuencias.

Así, compañías como el Consorcio Altán, AT&T o Movistar y otras podrán competir desde un inicio por los paquetes de espectro de su elección y Telcel hará lo propio más adelante, pues a la fecha esa marca ya cuenta con 177.92 MHz de señales de entre todas las que tiene concesionadas como para ir por 20 MHz más, cuando el límite de la fase uno de la licitación establece que el tope máximo de tenencia espectral para entrar en competencia deben ser 194.46 Megahertz.

Pero un posible desinterés del resto de los licitantes y el hecho de que la segunda etapa de la licitación fija el tope en 209.42 MHz, haría posible que Telcel compita por un bloque adicional de 20 MHz y hasta por 40 MHz en una tercera etapa del proceso.

Telcel ha llegado a esa situación de tenencia espectral, luego de una adquisición de 60 MHz pertenecientes a MVS Comunicaciones, operación que fue aprobada por el IFT en abril, para que inmediatamente en mayo la operadora se acercara al regulador a solicitar los permisos que loe habiliten a explotar esas frecuencias para telefonía o Internet móvil.

Actores de la industria pugnan porque a Telcel no se le permita competir por espectro adicional de la banda del 2.5, por su naturaleza técnica, más apta para la capacidad de transporte y penetración de servicios móviles.

Puede ocurrir incluso, que Telcel, ante el establecimiento de que tendrá que esperar para competir por espectro en el proceso licitatorio, decida buscar a las compañías que aún tengan esas frecuencias en sus manos, alcance acuerdos como el logrado con MVS en noviembre del 2016 y entonces decline participar en la próxima subasta.

Según el IFT, esta será la última banda de capacidad que México licite en el corto plazo; la siguiente subasta de espectro de esta naturaleza, la correspondiente a la banda de los 2.3 GHz, se concretará más allá del año 2020.

Fuente: El Economista

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