Apple presentó hoy sus nuevos modelos de teléfono inteligente, los iPhone XS y XS Max, con una pantalla cubierta por un nuevo tipo de cristal, protección especial ante líquidos, y disponibles en dorado, plateado y gris.
«Hoy llevamos el iPhone X al siguiente nivel. Les presento el que es, de lejos, el iPhone más avanzado que jamás hayamos creado», indicó durante la presentación el consejero delegado de Apple, Tim Cook.
El iPhone XS tiene una pantalla de 5,8 pulgadas (14,7 centímetros) con tecnología OLED, introducida en los modelos del año pasado y que incrementa el contraste y el brillo con respecto a las pantallas tradicionales LCD.
Como viene siendo habitual en los últimos lanzamientos de iPhone, Apple también presentó una versión más grande de este mismo teléfono, bautizado iPhone XS Max, que tiene una pantalla de 6,5 pulgadas (16,5 centímetros), la más grande de la compañía hasta la fecha.
Apple ha incrementado el tamaño de las pantallas sin prácticamente aumentar las dimensiones de los teléfonos con respecto a sus predecesores, de manera que, por ejemplo, el iPhone XS, que tiene una pantalla igual de grande que el X, es en su conjunto un dispositivo más pequeño.
Entre las novedades del nuevo teléfono también se encuentran mejoras en la reproducción de imágenes mediante las tecnologías Dolby Vision y HDR10, altavoces con mayor amplitud de sonido estéreo y un incremento de la velocidad del sistema de reconocimiento facial introducido el año pasado.
La protección ante el agua se ha mejorado de manera que los teléfonos no se estropeen incluso «si caen a la piscina» y se han hecho pruebas con todo tipo de líquidos, «incluso cerveza», apuntó el vicepresidente de Marketing de la compañía, Philip Schiller.
El Apple Watch Series 4
La última generación del Apple Watch ha sufrido un rediseño que ha permitido hacer la pantalla un 32% y un 35% más grande y más aprovechada (con los marcos más pequeños), estará disponible en dos tamaños, 40 mm y 44 mm.
Sin embargo, su tamaño no es lo único diferente. El nuevo Apple Watch Series 4 ha cambiado por fuera, con un altavoz un 50% más alto, pero, también, por dentro con el nuevo chip S4 con un procesador de doble núcleo personalizado de 64 bits.
Las nuevas características se han centrado, principalmente, en la salud de los usuarios de la mano del nuevo watchOS 5. Es decir, Apple ha diseñado una nueva función o característica que detecta caídas. Sí, has leído bien. El reloj es capaz de detectar, por los movimientos del usuario, una caída y enviará una alerta al contacto de emergencia señalado con la ubicación del usuario para que lo rescaten lo antes posible.
También ahora el Apple Watch Series 4 leerá el ritmo cardíaco de los usuarios con más detalle gracias a la incorporación de un sensor eléctrico que le permite realizar un electrocardiograma en 30 segundos, por primera vez en un producto de este tipo.
Así, al entrar en la app ECG y tocar la retículo lateral, se obtendrá información muy detalla del ritmo cardíaco de manera que los doctores podrán detectar, más fácilmente, cualquier anomalía en un paciente.
El precio del nuevo reloj de Apple, en su modelo más básico cuesta $399 dólares, pero el precio aumenta hasta los $499 dólares.
La nueva generación Apple Watch Series 4, puede ser reservada a partir del 14 de septiembre y estará disponible el 21 de septiembre.