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Agencias

El grupo de telecomunicaciones estadounidense AT&T anunció que el año pasado ganó 19.370 millones de dólares, un 34% menos que en 2017, cuando le impactó positivamente la reforma fiscal de Estados Unidos.

La empresa estadounidense con sede en Dallas (Texas) tuvo un beneficio por acción anual de 2,85 dólares, por debajo de los 4,76 dólares obtenidos en el ejercicio previo, en el que las ganancias fueron de 29.450 millones.

La facturación de la segunda operadora de telefonía móvil del país ascendió a 170.756 millones de dólares, una cifra 6 % superior a la del año anterior.

En cuanto a los resultados del cuarto trimestre, los más seguidos ayer en Wall Street, AT&T tuvo un beneficio neto de 4.858 millones de dólares (66 centavos por acción), un 74% menos interanual.

Por su parte, la facturación se incrementó hasta alcanzar los 47.993 millones, un 15% más, que la empresa atribuye a la adquisición de Time Warner, una operación que cerró el pasado verano por 85.000 millones de dólares.

En cuanto al servicio de movilidad, que representó unos ingresos de 13.849 millones en el cuarto trimestre, la firma logró sumar 134.000 nuevos contratos telefónicos de larga duración.

Mientras sigue perdiendo suscriptores a su servicio de televisión, que optan por plataformas innovadoras como Netflix y Hulu, AT&T vio crecer sus ingresos en el negocio de WarnerMedia.

Dentro de WarnerMedia, contribuyeron las licencias de teatro y televisión de Warner Bros y el aumento de suscripciones a las plataformas Turner y HBO.

Los resultados no acabaron de convencer a los inversores de la Bolsa de Nueva York y poco antes de la apertura de la sesión, las acciones bajaban un 2,61% en las operaciones electrónicas. La empresa se ha devaluado un 18% en el último año.

Fuente: EFe

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