Agencias
TV Azteca, el segundo mayor productor de contenidos de televisión en español a nivel global, dijo que mantendrá una postura de buscar dialogar con los tenedores de su bono internacional que vence en 2024 y dejó de pagar hace dos años, por el cual ahora los dueños de esos instrumentos pretenden que se les repare el daño por la vía legal en Estados Unidos.
Esta postura de la televisora surge luego que Bloomberg reportó que tenedores no garantizados de 63 millones de dólares del bono por 400 millones en cuestión buscan una petición unilateral de bancarrota al amparo de las leyes estadounidenses, algo por lo cual la televisora aparentemente no ha sido notificada de manera oficial.
«Al respecto, como siempre lo hemos hecho, atenderemos con responsabilidad y firmeza todos los procesos legales, sabedores de que contamos con la razón ética y jurídica, y de que así lo confirmarán las autoridades judiciales», dijo la empresa en un posicionamiento.
De esta manera solo parece cuestión de tiempo para que la batalla legal entre la empresa y los dueños del bono se desarrolle en Estados Unidos luego de reportes de reveses judiciales en México, donde un juez de Ciudad México congeló cualquier intento de cobro.
El bono en cuestión fue emitido en el mercado internacional en agosto de 2017 con una tasa de interés fija de 8.25%, cuyos recursos sirvieron principalmente para saldar un bono de 500 millones de dólares que vencía en 2020.
Entre los principales acreedores del instrumento se encuentran los fondos Fidelity Investments, Contrarian Capital Management y Cyrus Capital Partners, quienes habrían empujado a la empresa a un concurso mercantil involuntario, de acuerdo con The Wall Street Journal.
La decisión de la compañía, con sede en Ciudad de México, de pausar los pagos de los intereses la hizo pública en febrero de 2021. Sin embargo dos semanas antes dio las primeras señales de que ya preparaba el terreno para este impago como parte de su estrategia financiera con un cambio en la dirección general.
Benjamín Salinas Sada, hijo de Ricardo Salinas, dejó así la dirección general de la televisora tras más de cinco años en el encargo para ser relevado por Rafael Rodríguez, hasta ese entonces director jurídico.
“Rafael Rodríguez toma las riendas de TV Azteca para continuar y reforzar los procesos de transformación y alineación dentro de la empresa que inició Benjamín Salinas, los cuales implican profundas transformaciones estructurales, organizacionales y financieras para garantizar el éxito, la vigencia y solvencia de la empresa en el futuro”, dijo en ese entonces.
Desde que la empresa anunció en febrero de 2021 que decidió que, como parte de su estrategia prepagaría un bono a 2022 y aplazar el pago del cupón correspondiente a febrero de 2021 del bono que vence en 2024, buscaría dialogar con los tenedores para alcanzar un acuerdo a la brevedad que no llegó.
El argumento de la empresa para no pagar el bono fue estrategia para asegurar su viabilidad a largo plazo.
Como muchas empresas, en ese momento TV Azteca enfrentaba una caída de ingresos, en su caso relacionada con menos anunciantes, ya que muchos priorizaron sus recursos a la liquidez y no a la publicidad. Adicional a ello las televisoras emexicanas en señal abierta enfrentaban la competencia de los contenidos en internet, los cuales permiten a los anunciantes focalizar de una manera más profunda sus pautas comerciales a públicos específicos.
No es claro hasta qué punto la televisora y los tenedores buscaron reencausar su situación, sin embargo en agosto de 2022 comenzaron a aparecer señales de desesperación.
La televisora fue informada en ese entonces por el representante común de los tenedores del instrumento, el banco de inversión The Bank of New York Mellon, de las intenciones de los bonistas de acelerar la exigencia de pago.
Desde que Bloomberg reportó –a inicios de mes– la orden como parte de una demanda presentada a fines del año pasado por TV Azteca, argumentando que las órdenes del gobierno para que las empresas de medios permanecieran abiertas durante la pandemia generaron pérdidas que impidieron los pagos de las letras, los tenedores de bonos han estado ejerciendo presión en Estados Unidos.
Su intención es la de obligar a la segunda emisora más grande de México a que pague 490 millones de dólares reclamados.
A la fecha TV Azteca no ha realizado los últimos cuatro pagos de cupones de los bonos en dólares con vencimiento en 2024, sumando un total de alrededor de mil 320 millones de pesos (71 millones de dólares) a pesar de tener dos mil 800 millones de pesos en efectivo a fines de septiembre, dijo Fitch Ratings en un informe en enero.
Luego del reporte sobre los intentos de bonistas en Estados Unidos intentando hacer que se apegue al Capítulo 11 en Nueva York, las acciones de la televisora cayeron 2.8% a su nivel más bajo desde el 8 de noviembre de 2022, cuando cerró en 0.719 pesos. Con la caída del martes suma ya cuatro días de baja –la racha más larga desde noviembre–, con un descenso acumulado de 6.5%.
El índice de referencia de la Bolsa Mexicana de Valores, por su parte, cerró con un alza de 1.4% favorecida por la buena jornada de los grupos financieros.
Fuente: AXIS Negocios