Por Antonio Lorenzo, eE
MásMóvil coliderará el mercado, ya sea con la fusión con Orange o con Vodafone-Zegona
La fusión Orange-MásMóvil muestra sus costuras en el momento más frágil de un noviazgo de casi 18 meses -como dos embarazos humanos seguidos-, que ha sido el tiempo transcurrido desde que trascendió el acuerdo de integración. La convulsión en el sector español tras la anunciada irrupción en el tablero de juego de Zegona (disfrazada de Vodafone España) y el empeño de Bruselas por cobrar demasiado caro la reducción del número de jugadores complican las cosas. Si llega a saberlo entonces Orange, quizá no hubiera movido pieza entonces con tanto arrojo. Las distancias entre partir un piñón y partir peras pueden ser más cercanas de lo que parecen.
El mapa competitivo que existía en julio de 2022 apenas se parece al actual. En aquel verano, el grupo MásMóvil era la sensación del mercado, Vodafone se mantenía a flote, Orange contaba los días para coronarse como líder del negocio por clientes y Telefónica hacía cábalas para no perder cuota, siempre aferrado a su fibra y a los derechos del fútbol, al tiempo que reducía deuda a golpe de generación de caja y desinversiones parciales en redes. A su vez, los pequeños operadores apenas quitaban el sueño a los grandes, frente a los desvelos que ahora provoca Digi, Finetwork, Avatel y Adamo, ya asentados en un mercado boyante de oportunidades.
Por unas cosas y por otras, ni el enamoramiento inicial ni los intereses compartidos de los contrayentes mantienen estos días la pujanza de antaño. De hecho, fuentes del mercado especulan con las fisuras de la fusión en el caso de que la Comisión Europea no acepte los nuevos remedios propuestos por ‘naranjas’ y ‘amarillos’. El gran temor de Orange-MásMóvil consiste en fortalecer en exceso al cuarto operador con la venta del excedente de frecuencias de 3,5 GHz.
El sentido común apunta a que la fusión se realizará sí o sí, entre otras cosas porque una hipotética renuncia de Orange le alejaría del primer puesto del mercado por clientes, para desplazarse hasta el tercero. Ahora mismo, la suma de las cuotas de mercado en telefonía móvil de Orange (22,01%) y MásMóvil (20,93%) alcanza los 42,94%. Si MásMóvil quedara plantada en altar, Zegona ya ha reconocido que propondría la fusión al grupo que dirige Meinrad Spenger. En ese supuesto, una Zegona/Vodafone unida a MásMóvil se apropiaría del 42,80% de la cuota del negocio español de telefonía móvil, para situarse como sorprendente número uno por clientes del mercado.
La fusión se realizará sí o sí, porque una hipotética renuncia de Orange le alejaría del primer puesto del mercado español por clientes
Por lo tanto, en un caso u otro, Spenger puede estar seguro de que coliderará el mercado español de telecomunicaciones, ya sean en compañía de Orange o, como plan B, con la nueva Vodafone España que proyecta Zegona. Esa combinación permitiría reunir a dos viejos viejos conocidos de los tiempos de Euskaltel, por no remontarse a las cuitas con la compra de Yoigo, con ambos grupos en la liza, en julio de 2016. Recordemos que Zegona tuvo durante meses apalabrada la compra de Yoigo con Teliasonera por un importe de mil millones y, en el último momento, llegó Spenger con 610 millones de euros en la mano y la adquirió en un pispás. A la postre, aquel movimiento marcó el destino de MásMóvil.
Fuente: eE