Por Lidia Montes/Antonio Lorenzo, eE
- La operación dará lugar al operador con mayor número de clientes en España
- Los compromisos incluyen la cesión de espectro a Digi, valorados en 120 millones
- El joint venture tendrá un valor de 18.600 millones, con ingresos conjuntos anuales de 7.400 millones
Casi 19 meses después del anuncio del acuerdo y tras un año de tira y afloja regulatorio, Bruselas ha dado finalmente este martes luz verde a la fusión entre Orange España y el Grupo MásMóvil, una aprobación condicionada a que ambas empresas cumplan una serie de compromisos para no distorsionar la competencia en el mercado español de operadores de telefonía e internet. Una de esas condiciones será que se libere espectro en favor de la teleoperadora Digi, operador que prevé invertir hasta 120 millones de euros en la adquisición de frecuencias exdentarias de telefonía móvil.
Tras superar la criba de Bruselas, la integración espera cerrarse a finales del próximo marzo, plazo en el que ya se habrá formalizado la nueva denominación de un joint venture valorado en 18.600 millones de euros, excluidos la compañía de torres de telefonía Totem España, así como MásMóvil Portugal. Hasta finales del primer trimestre de este año, las dos compañías seguirán operando de forma independiente.
La vicepresidenta de la Comisión Europea responsable de Competencia, Margrethe Vestager ha explicado que la fusión de Orange y MásMóvil «amenazaba la competencia en la oferta de servicios de Internet móvil y fijo en España». Sin embargo, «los compromisos ofrecidos por las partes permitirán a Digi, el operador móvil virtual más grande y de más rápido crecimiento en España, producir la fuerte presión competitiva ejercida por MásMóvil». Esta solución garantizará, según la danesa, «un mercado de telecomunicaciones competitivo, en términos de precios, calidad y conectividad 5G».
Las dos empresas plantearon a la Comisión Europea una serie de compromisos para abordar las preocupaciones de Bruselas relativas a la limitación de la competencia en el mercado español o la posible subida de precios. Por un lado, se venderá el espectro de banda de MásMóvil a Digi en tres frecuencias: dos bandas de frecuencia media (1.800 MHz y 2,100 MHz) y una de alta frecuencia (3.5 GHz). Tal desinversión permitirá que Digi cree su propia red móvil y que plantee una fuerte presión competitiva a la fusión. Desde el punto de vista económico, la joint venture sumará unos ingresos de 7.400 millones de euros, con un EBITDAaL superior a los 2.300 millones de euros y unas sinergias de 450 millones de euros por ejercicio a partir de 2028.
Como estaba diseñado entre los jugadores implicados en la operación, el joint venture ofrecerá a Digi un acuerdo de roaming nacional que será opcional, por lo que el reforzado cuarto operador podrá decidir si lo utiliza o no. La finalidad es complementará la red de la que es dueña Digi con la de la empresa fusionada mientras empieza a utilizar ese ancho de banca liberado. Esta condición es esencial ya que, al igual que la red actual de MásMóvil, la futura red móvil de Digi probablemente no cubrirá la totalidad de España. Como el acuerdo de itinerancia nacional es opcional, Digi será libre de permanecer con su actual proveedor Telefónica o elegir otro operador de red móvil en España, es decir, la empresa resultante de la fusión o Vodafone.
Además, la decisión de Bruselas viene después de un escrutinio al modelo de negocio de Digi, al que finalmente considera como «un comprador apropiado del espectro desinvertido«. Además, la operadora ha tiene experiencia en otros mercados europeos como Rumanía y cuenta con una red relativamente amplia de fibra en España, que continúa construyendo. Por este motivo los compromisos no incluyen banda fija.
La aprobación del Ejecutivo comunitario llega tras una investigación en profundidad de la operación. Y es que Bruselas consideró que la operación limitaría la competencia en el mercado de telefonía e internet en España, ya que consideraba que podría encarecer los servicios al disminuir el número de operadores de red en España y un competidor (Grupo MásMóvil) «innovador y significativo».
En concreto, Bruselas advirtió de que la operación crearía el mayor operador de telefonía e internet por volumen de clientes en España y aumentaría significativamente su participación relativa en el mercado. Además, podría derivar en un aumento de los precios superior al 10%.
El Ejecutivo comunitario ha advertido de que la operación eliminaría un operador muy importante, dado que Orange y MásMóvil son competidores en el mercado y la segunda operadora ha presentado ofertas muy competitivas a través de sus operadores Yoigo y MásMóvil, con la movilización de algunos antiguos clientes de Orange en España.
Fuentes de Orange España han recordado que la sociedad resultante configurará al líder del mercado español «por número de clientes, experiencia de usuario, talento y cobertura de fibra y móvil». De esa forma, la combinación de los activos, capacidades y equipos de las dos compañías en España sumarán más de 7,3 millones de clientes de banda ancha, más de 30 millones de servicios móviles y más de 2,2 millones de clientes de televisión.
Primeras reacciones
Christel Heydemann, CEO de Orange, asegura que el anuncio de la fusión «marca un momento decisivo para el Grupo en Europa». En su opinión, «la propuesta de joint venture con MásMóvil creará un actor único, más fuerte y sostenible en España. Al unir fuerzas, podemos disponer de mayor escala, podemos innovar y podemos impulsar la inversión en las redes del futuro en beneficio de los consumidores y las empresas».
Meinrad Spenger, CEO de MásMóvil, añadió: «¡Lo bueno se hace esperar! Estamos encantados de asumir un rol relevante en el sector de las telecomunicaciones en España. Nuestro excepcional equipo está comprometido en crear una empresa unificada y diferencial, capaz de generar impacto positivo.
Discrepacias de Avatel
Ignacio Aguirre, CEO de Avatel, ha mostrado sus discrepancias respecto al tipo de los remedios aceptados por Bruselas, ya no se ajustan a lo que a Avatel le hubiera encajado. En su opinión, «el mercado tiene que seguir enfocado en dar un servicio competitivo al cliente en todo el territorio, y esta resolución es un paso en esa dirección. Nosotros mostramos interés por unos remedies ambiciosos que incluyeran espectro, activos de fibra, marcas o incluso clientes». El mismo directivo también recuerda que «Avatel parte de una posición privilegiada, porque ya tiene un despliegue capilar de negocio en zonas de poca densidad de población, con un propósito socioeconómico grande para el mercado y en una fase madura. Estamos donde los demás quieren estar. Además, ya somos operador nacional y nuestro plan de expansión sigue su curso previsto». Aguirre también ha recalcado que su grupo es y será «clave en la consolidación del sector de las telecomunicaciones en España y seguiremos enfocados en llevar conectividad de banda ancha a zonas de menor densidad poblacional, en eliminar la brecha digital y en ofrecer nuestros servicios a una mayor parte de la población española».
Fuente: eE